Un rayo – sin duda ateo o blasfemo – ha decapitado al Cristo de Vera. La noticia la he conocido en el blog de Hugo. Al respecto caben hacer tres hipótesis:
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Que Zeus tonante, rey de los dioses y portador del rayo, se está tomando la revancha. Si fuera éste el caso habrá que ir puliendo las oraciones, imagináos: ”Zeus save the Queen”, “Zesusito de mi vida, eres niño como yo”, “Me cagooo en Zeusssss”…
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Que el dios de los cristianos no se preocupa mucho de sus estatuas. Incluso es posible que juzgase la de Vera excesivamente fea. Desde luego ya son ganas de disfrazar de senador romano a un palestino del siglo I.
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O que la meteorología es así: no conoce de deidades.
Alguno habrá que vea en esto el comienzo del Apocalipsis. 2011: ¡lo volvieron a matar!
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