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sábado, 27 de julio de 2013

Comunarios deciden expulsar a adolescentes embarazadas

LA PAZ/ERBOL 


Foto rpp.com.pe Las niñas son vulnerables a los abusos.

Los habitantes de tres poblaciones de las provincias Muñecas y Franz Tamayo, del departamento de La Paz, resolvieron expulsar a las adolescentes embarazadas o en estado de concubinato porque son un “mal ejemplo” en el colegio o “trae mala suerte” para la zona, según sus usos y costumbres.

En dos casos, por la intermediación de la representación Defensorial de La Paz, las adolescentes no llegaron a ser echadas y fueron restituidos sus derechos a la educación y convivencia. En otro caso, la adolescente que fue violada, embarazada y que abortó, escapó de su hogar y llegó a la sede de gobierno para denunciar el hecho. Hoy se encuentra albergada en un refugio de El Alto. Las causas se encuentran en proceso de investigación.

 Caso de Apolo

Una adolescente gestante de 16 años fue golpeada en presencia de sus padres y parte de la población, por decisión de los dirigentes, por el embarazo a causa de una violación, en la población de Cochawito, municipio de Apolo, provincia Franz Tamayo, La Paz.

“Según los registros de la Policía y el Ministerio Público, la adolescente estaba en el quinto mes de gestación, (pero) por los golpes (recibidos) pierde al bebé, le hacen abortar y queman el feto delante de ella”, afirmó Teófila Guarachi, representante Defensorial en La Paz.

La víctima tuvo que escapar a La Paz para denunciar la violencia y presentó la denuncia a la representación Defensorial y que la misma entidad solicitó a las autoridades de la justicia indígena originaria y ordinaria tomar “cartas en el asunto” para que se sancionen y sensibilice sobre los límites de la justicia comunitaria. El caso ya se encuentra en estrados judiciales.

La adolescente tras huir de su población natal hoy se encuentra internada en un albergue privado porque la Secretaria Departamental de Gestión Social (Sedeges), al igual que la Defensoría Municipal de La Paz, no quisieron hospedarla argumentando que el caso no está judicializado.

Las dos instancias del Estado no quisieron fijarse en la situación de la adolescente que inmediatamente debería recibir refugio para pernoctar la noche, recibir alimentación y cuidado ante las consecuencias que podría ocurrir si volvía a su pueblo.

Las autoridades del Viceministerio de Descolonización, Justicia Indígena y de Educación no tomaron acciones rápidas, hacer que se investigue y sancione a los responsables de las decisiones de expulsión, según Guarachi.

Fiscalía investiga violación

El fiscal Leopoldo Ramos informó que iniciaron las investigaciones a cuatro sospechosos entre ellos el hermano consanguíneo, dos vecinos y un dirigente sindical involucrados en el caso de violación a la adolescente.

El representante del Ministerio Público dijo que los dirigentes en una reunión pidieron a su padre dar entre dos a cinco chicotazos a la embarazada, pero pasado 15 días la adolescente perdió a su bebé y los comunarios “intentaron incinerarlo, pero que fue rescatado” para el respectivo análisis y dar con el presunto violador.

“Inicialmente, la víctima nos ha referido que ha injerido pastillas de ampicilina y otras no abortivas, además esas pastillas no harían mucho efecto y después de 15 días (del chicoteo) tuvo la interrupción, pero no hubo golpiza de los dirigentes u otros sino que en la reunión le asignaron al papá para que le pueda dar dos o creo que cinco huascazos”, afirmó.

Caso de Ayata

Otra niña de 15 años embarazada por su relación sentimental con otro varón de 19 años también, junto a su pareja, iban a ser expulsados de un establecimiento educativo en la población de Ayata, provincia Muñecas. El caso no llegó a la justicia ordinaria porque restituyeron sus derechos.

Los dirigentes de la zona en una reunión “determinaron que ninguna niña, adolescente, hombre o mujer que sea concubina, concubino o embarazada va a poder seguir asistiendo a clases (sino ser) expulsada o expulsado inmediatamente la adolescente que esté en gestación”, señaló Guarachi.

Según los datos recogidos por la Defensoría y la Fiscalía, las autoridades del lugar alegan que estos hechos representarían “un mal ejemplo para la población y el resto de los estudiantes”, “traer mala suerte o hacer que caiga la helada” u otros fenómenos naturales.

La Defensoría en el seguimiento del hecho conoció que la pareja de la adolescente gestante tomó la decisión de suicidarse. Pero, tras el ingreso de un equipo multidisciplinario de profesionales lograron persuadir a los dirigentes para que la embarazada continué estudiando y no fue expulsada.

“Hacemos conocer (el caso a las autoridades) del Ministerio de Educación y los viceministerios de Descolonización y Justicia Indígena y solicitamos para que puedan intervenir, (pero) no hemos tenido respuesta de ninguna de las autoridades”, explicó la representante Defensorial.

Familia sufre presiones

Hermógenes Apaza, padre de la adolescente, señaló este lunes que las autoridades del ayllu Huayra Pata buscan excluir de algunos proyectos de desarrollo que implementa la Alcaldía y la Gobernación de La Paz porque su hija se encuentra en estado de gestación.

“Llevé a mi hija al médico y constatamos que estaba embarazada y me enojé bastante, pero jamás pensé sacarla del colegio donde estudia (…) Pido que el padre del joven fallecido, (el abuelo), reconozca y lleve su apellido”, demandó.

Apaza refirió que al conocer que la adolescente estaba embarazada le comunicaron al progenitor y su familia, pero al parecer sus padres le regañaron y sólo conocieron que el varón se había suicidado.

 Necesidad de trabajo

El director de la Unidad Educativa Nemesio Aliaga, Aníbal Burgoa, donde estudia la gestante, indicó que varios niños y niñas se ven “obligados” por las condiciones de pobreza a buscar trabajos y viajan donde llegan a embarazarse e incluso adquirir algunos vicios.

Los autoridades originarias decidieron que no se permita más embarazos de adolescentes, pero falta que los niños, niñas y adolescentes reciban la educación sexual y reproductiva, según explicó Burgoa.

Pero, la estudiante gestante no abandonó ni un sólo día las clases. No se hizo violencia al estado físico de la adolescente. Sobre el suicidio, las autoridades del colegio y padres de familia desconocemos porque parece que existen otros móviles, sostuvo.

 Caso de Chuma

En la población de Chuma, provincia Muñecas, dos adolescentes que decidieron vivir en concubinato también iban a ser expulsados, por decisión de los habitantes y los dirigentes, pero ante la intervención de la Defensoría hizo que se restituyeran sus derechos fundamentales.

Casos del 2012

La representación Defensorial de La Paz, durante el seguimiento de los últimos casos, también conoció de otras cuatro expulsiones de adolescentes en estado de gestación en la provincia Camacho, con la misma modalidad de resolución comunitaria.
 
 

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