México inaugura con fondos públicos un Hospital Nacional HomeopáticoEXPANDIR
México se encuentra en una situación complicada. Mientras los mexicanos se manifiestan en las calles por la desaparición de los 43 estudiantes en Ayotzinapa; el Presidente Enrique Peña Nieto inaugura el nuevo Hospital Nacional Homeopático, promoviendo así un sistema de medicina alternativa, que es considerado por muchos como una pseudociencia.
El hospital nació, originalmente, en el año de 1893 y este año ha sido renovado con un presupuesto de 761 millones de pesos. Su objetivo, según el documento oficial de inicio del proyecto, es el siguiente:
Fortalecer la estructura y la organización de la red de servicios médicos para el Valle de México y de la zona centro país, contribuyendo a mejorar la interrelación con la red de Hospitales Federales de Referencia y los Institutos Nacionales de Salud, mediante la construcción de nuevas instalaciones que permitan impulsar lainvestigación, la enseñanza y la atención médica homeopática de alta calidad.
El sistema de salud mexicano podría ser de mejor calidad. Para los que lo hemos vivido, se trata de una lucha constante con la disponibilidad de citas y medicinas que no logran sostener la alta demanda. El caso es, ¿por qué invertir en un hospital de medicina alternativa cuando la medicina tradicional necesita más atenciones?
Claro, según el segundo Informe de Gobierno del Presidente mexicano, la renovación también trajo la modernización de otros 27 hospitales generales, 11 comunitarios y 6 materno-infantiles. Afortunadamente, el hospital en cuestión también ofrece otro tipo de servicios de salud tradicional que no tienen que ver con la homeopatía. Pero, ¿es suficiente? ¿Era realmente necesario reformar un viejo edificio y dar alas oficiales a una pseudociencia en lugar de convertirlo en un espacio enfocado en tratamientos científicamente demostrados?
México inaugura con fondos públicos un Hospital Nacional HomeopáticoEXPANDIR
Hasta la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha hecho recomendaciones advirtiendo sobre los peligros de abandonar la medicina tradicional en favor de tratamientos exclusivamente homeopáticos. La organización señala que la homeopatía no sirve, por ejemplo, para tratar enfermedades como la tuberculosis, el SIDA, la malaria o la gripe común. Aún con ese conocimiento, las autoridades políticas y de salud del gobierno mexicano deciden renovar una práctica que debería ser obsoleta desde hace mucho tiempo.
México no es el único país con un hospital homeopático. En Argentina existe la Asociación Médica Homeopática que, además, está reconocida por el Ministerio de Salud del país. En Europa, Francia e Inglaterra también tienen hospitales especializados en este tipo de medicina alternativa.
En una sociedad democrática, la libertad de creencias es imprescindible. Sin embargo, ¿deberíamos promover una pseudociencia como la medicina homeopática en lugar de educar con una visión más racional el tratamiento de las enfermedades? [vía Presidencia de la República]