Páginas

viernes, 22 de abril de 2011

Denuncian que la religión domina al gobierno

Achacan al fundamentalismo la ola de violencia contra las mujeres

violencia doméstica

Grupos de activistas dicen que el fundamentalismo religioso incita a la violencia doméstica. (archivo)

Por ELNUEVODIA.COM

Diversos grupos defensores de los derechos civiles criticaron hoy el fundamentalismo religioso que entienden se apoderó de las diversas estructuras de gobierno.

“Las mujeres de nuestra Isla están sufriendo las consecuencias de que nuestro Estado se haya convertido en una teocracia de facto”, denunció en comunicado de prensa el Movimiento Amplio de Mujeres de Puerto Rico (MAMPR).

Las organizaciones de derechos humanos participantes, entre ellas el MAMPR, Amnistía Internacional, el Comité contra la Homofobia y el Discrimen y la Nueva Escuela, realizaron una manifestación  frente al Capitolio denominada: “¡Alto a la teocracia de facto!”.

Según se indicó, en la actividad mujeres y hombres representaron la crucifixión de los derechos humanos de las mujeres y de la comunidad lésbica-homosexual-bisexual-transexual y transgénero de la Isla.  Para ello, una mujer cargó con una cruz y fue seguida por mujeres que representaron a las 15 asesinadas en los primeros meses del 2011.  Mientras éstas caminaban, hombres y mujeres representando a la Legislatura, la Rama Ejecutiva, la Judicatura y el Fundamentalismo Religioso, las escoltaron y las amenazaron en una adaptación contemporánea del vía crucis cristiano.

En una declaración leída como parte del acto, las organizaciones ciudadanas responsabilizaron al fundamentalismo religioso por "la crucifixión de los derechos humanos de las mujeres de la Isla."

“El amor al prójimo incluye respeto, incluye solidaridad e incluye valor para defender a las personas vulnerables”, leía la declaración.

“Queremos un país en el se respete la vida de toda persona.  Un País en el que cada cual pueda vivir su espiritualidad libremente, desde el amor al prójimo y el respeto a la diversidad.  Queremos un país en el que las mujeres y toda otra persona, independientemente de su orientación o identidad sexual, puedan vivir sin miedo a ser agredidas o asesinadas.  Un país en el que la ley y el orden sean sinónimos de equidad y no de represión”, concluyeron.

(vía elnuevodia.com)

No hay comentarios: