El sacerdote Luis Santamaría asegura haber encontrado «una serie de grupos y personas de la órbita de la nueva religiosidad y del esoterismo que hacen afirmaciones muy peculiares en torno al cambio anual de calendario», con «unas consecuencias rituales de lo más extraño». Lamenta el «triste espectáculo que contrasta con las impresionantes actas de mártires que conservamos en la Iglesia como testimonio de antepasados nuestros que se dejaron matar antes que quemar un puñado de incienso delante de un ídolo».
(vía http://infocatolica.com/?t=noticia&cod=10839)
Nota de Ateorizar: Porque creer en una virgen que se preña y pare un hijo que convierte agua en vino, revive muertos y camina sobre el agua hace mucho más sentido. Ay, la lógica pendeja de los cristianos...
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