Un videojuego puede tener muchos usos, con él se puede educar, entretener, estimular y publicitar, incluso denunciar. Precisamente esto último es lo que persigue Vatican Quest, una incendiaria obra flash cuya intención es la de criticar la postura que ha adoptado la Iglesia Católica sobre los casos de pedestaria protagonizados por miembros del clero. El título en cuestión nos pone en la piel del Papa, sospechosamente parecido a Ratzinger, y tendremos que ir recogiendo monaguillos para llevárselos al cardenal de turno sin que seamos vistos por algún medio de comunicación. Polémico como pocos, este videojuego creado por Round Games pone el dedo en la llaga parodiando hasta el extremo la figura del Santo Padre. Unos aplaudirán fervientemente la existencia de Vatican Quest, otros clamarán al cielo por esta ofensa, pero, desde la más absoluta imparcialidad, deberíamos sentirnos fascinados por el enorme potencial de los videojuegos.
(vía faseextra.com)
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